Soñarnos tomando un helado es presagio de buena suerte y prosperidad para las personas sanas.

En caso de estar enfermo y soñar que se come un helado es indicio de complicaciones con la enfermedad.

Este sueño también hace referencia a algunos aspectos de nuestras relaciones afectivas, el contraste entre el frío y la dulzura indican que es necesario mantener un equilibrio espiritual para poder disfrutar las oportunidades que se presentan en nuestra vida.

Soñar que vemos un helado en una vitrina y no lo compramos indica que existe carencia de dulzura y necesidad de cariño en nuestra vida.

Este sueño insinúa inconformismo a nivel inconsciente por nuestra situación afectiva actual.

En caso de soñarnos preparando un helado refleja nuestras cualidades creativas y la capacidad para esperar el momento oportuno para actuar.

Los elementos que utilicemos en el sueño para crear el helado también nos permitirán comprender mejor el significado del sueño.

Si en el sueño vemos como un helado se derrite en nuestras manos indica que frecuentemente desaprovechamos algunas oportunidades que difícilmente se repetirán.

Es una invitación a tomar ciertos riesgos y explotar al máximo las situaciones de nuestra vida.