Soñarse mirando a distancia una isla sugiere un cercano mejoramiento en la vida y el fin de angustias y problemas.
Soñarse reposando en una isla hermosa rodeada de un mar tranquilo insinúa que pronto habrá un viaje, tal vez de placer.
Una joven que sueñe esto insinúa deseos de matrimonio con probabilidades de realizarse pronto.
Soñarse en una isla rocosa y estéril es anuncio de mala suerte, malos negocios, problemas diversos, litigios, pérdida de dinero, etc.
Soñar a muchas personas en una isla insinúa que mediante su esfuerzo finalmente obtendrá los beneficios que está buscando.
Soñar que descubrimos una isla virgen es señal de que encontraremos nuevos aspectos de nuestra personalidad ocultos hasta ahora que nos permitirán destacarnos de entre los demás y conquistar nuevos espacios y proyectos.
Soñar que somos abandonados en una isla desierta es una señal de nostalgia y melancolía, posiblemente nos sintamos excluidos o rechazados por algunas personas que gozan de nuestro aprecio.