Soñar que cargamos leña en la espalda nos dice que los problemas que poseemos tardaran un buen tiempo en solucionarse.
Si la vemos organizada en haces, es anuncio de una noticia de un gran amigo que se encuentra enfermo.
Soñar con un madero quemándose es presagio de felicidad y paz, de verlo apagado será indicio de pesares y dificultades.
Prenderle fuego a la leña es señal de que recibiremos excelentes ganancias en nuestros proyectos, pero debemos esforzarnos un poco más.
Verse como un leñador trabajando y cortando madera es señal de felicidad y satisfacción en los proyectos del soñante.
Ver a otra persona que es un leñador indica que se presentarán oportunidades para entablar nuevas relaciones e incluso amistades duraderas.