Soñar que renunciamos independientemente de si es a un trabajo, relación, juego, etc.

suele ser señal de que nos hace falta algo más de determinación a la hora de ir en busca de nuestros ideales.

Nuestro criterio no está bien definido y ello nos lleva a que claudiquemos fácilmente ante la adversidad.

Los sueños en donde nos vemos renunciando suelen ser indicadores de cambios en diversos campos de nuestra vida, y la calidad de estos estará relacionada a los sentimientos que surjan en el sueño al momento de renunciar.

En caso de que las emociones generadas por la renuncia en el sueño sean positivos indica que los cambios efectuados serán positivos, es posible que no nos encontremos a gusto con el trabajo o el entorno social que nos rodea y por esta razón sea necesario y cambio de horizontes.

Los sueños en donde la renuncia nos genera sentimientos desagradables o negativos suelen sugerir que, a pesar de la disconformidad que estamos viviendo, es necesario evitar actuar impulsivamente, pues no es el tiempo adecuado para cambios que afecten drásticamente nuestra estabilidad, ya sea a nivel emocional o económico.

Soñar con reyes o presidentes que renuncian a su cargo es un mal augurio, pues insinúa que algunos malos negocios podrían generar problemas financieros que nos llevarán a la ruina.

Si somos nosotros quienes renunciamos a un cargo presidencial es señal de que nos sentimos esperanzados por distinciones y reconocimientos aún más altos de los que hemos recibido hasta ahora, pero es necesario tener los pies en la tierra y evitar grandes expectativas al respecto.